El pasado 5 de mayo el diputado radical Carim Peche presentó el proyecto de ley 1009/21 mediante el cual se autoriza al Poder Ejecutivo a gestionar la compra de vacunas contra el Covid-19.
En los fundamentos se señala la necesidad de gestionar vacunas para acelerar el plan de vacunación, demorado por el acotado ingreso de las mismas al país, en un número de dosis muy inferior al proyectado.
Diputados que responden a Capitanich en la legislatura chaqueña rechazaron de plano el proyecto y lo tildaron de “demagógico”.
Tras el último decreto que impuso la virtual vuelta a Fase 1 hasta el 30 de mayo, el jefe de la bancada opositora, Carim Peche, opinó que para salir de la pandemia se necesitan vacunas, no restricciones. Y recientemente destacó expresiones del gobernador Jorge Capitanich analizando la posibilidad de que la Provincia adquiriera vacunas.
“Celebro la postura adoptada por el Gobernador”, afirmó Carim Peche y pidió tratar el proyecto en sesión extraordinaria, ya que la Legislatura se acogió al asueto decretado para reducir el riesgo de contagio.
Finalmente, este miércoles 26 de mayo, el mismo Capitanich presentó un proyecto muy similar, con idéntico objetivo: el 1091/21.La iniciativa del Ejecutivo plantea la posibilidad de la intervención de terceros en las gestiones y operaciones, y cláusulas de confidencialidad en los contratos.
Por estas horas el gobernador del Chaco teme que prosperen las denuncias judiciales de vacunados VIP en la provincia y se conozcan los nombres de los beneficiados, y a eso se le suma la presión social de que la escalada de contagios y su fracaso sanitario, social y económico se lleve puesto algunos de sus funcionarios más cercanos.
Tal como lo reclamaba Peche, el tema será debatido el viernes 28 de mayo en sesión extraordinaria del parlamento chaqueño.
Por su parte Capitanich desempolva el proyecto del radicalismo cajoneado desde principios de mayo para intentar anotarse un poroto.