Feliz aumento de luz

Apenas entrado el 2023 en los hogares chaqueños se sintió el primer golpe al bolsillo. No terminamos de desearnos un feliz y próspero año nuevo cuando -sin previo aviso- Secheep nos hizo llegar facturaciones con incrementos que incluso en algunos casos superan el 100% del monto que veníamos abonando al que inminentemente se le adhiere un 8% extra. Así las cosas, parece que para la que sí será un año próspero es para la empresa de energía eléctrica del Estado, que desde el 10 de diciembre de 2007 en adelante, no hizo otra cosa que acumular deuda (que al día de hoy asciende a 40.000 millones de pesos) y brindar un ¿servicio? deplorable a la comunidad, a cambio de facturaciones impagables y sin techo.

Sumado a esto, el gobernador desde sus redes sociales nos da clases sobre cómo ser agradecidos con el Estado nacional por los subsidios que en definitiva sólo lo benefician a él y a quienes hoy ocupan oficinas de gobierno que no pagan la luz que consumen, a la vez que malacostumbran a la gente que el mismo gobierno empobreció y obligó a radicarse en asentamientos, a percibir un servicio sin tener que realizar un mínimo esfuerzo para pagarlo.

Los que nos dedicamos a la actividad privada sabemos muy bien que hace más de una década intentamos «estirarnos» lo más que se pueda y sostener nuestras pequeñas y medianas empresas priorizando las ganas de salir adelante. Los que no ven ese esfuerzo, son los gobernantes que nos siguen tirando a la pileta sin salvavidas en un auténtico «sálvese quien pueda» que tiene como finalidad y objetivo solamente ganar las elecciones para así, continuar ostentando una posición privilegiada que les permita vivir cómodamente sin mucho esmero.

¿Llegará el día que este gobierno empatice con la clase media y trabajadora de la provincia? ¿Podrán los que hablan de justicia social, ponerse en el lugar de los que trabajamos e invertimos, y acompañarnos en ese proceso tan digno y necesario de salvar la productividad de este suelo? ¿Lograrán entender que el pobre no quiere regalos, sino que quiere salir de la pobreza? ¿Cuánto tiempo más soportaremos en mansedumbre hasta que quienes nos gobiernan se den cuenta que este modelo de provincia está agotado y que necesitamos tendernos la mano entre todos para poder caminar hacia el éxito colectivo?.

Este año es clave porque como en todo año electoral, cada uno mostrará su plan de gobierno y con él, sus expectativas de crecimiento. Algunos estamos trabajando en eso, mientras otros pareciera que ya empezaron con la recaudación de fondos para una campaña de corte netamente populista, de esas que le gustan al kirchnerismo y la que tristemente la mayoría de nuestra población se ha acostumbrado. A la vez, allí, por la ancha avenida del medio transita la ciudadanía que hoy prácticamente se debate entre comer o pagarle a SECHEEP para tener un -mal- servicio de energía a eléctrica y sortear esta sensación de habitar en el medioevo.

Ojalá que en este nuevo año y a pesar de estas vicisitudes, podamos ser un poco más felices todos… y que a los que nos gobiernan, el privilegio no les nuble la empatía. ¿Podrán?

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