Lo que correspondía, de acuerdo a la cláusula gatillo, era del 7,8 % al valor de punto retroactivo al 1 de abril y del 5,8 % retroactivo al 1 de julio.
Sobre este tema, Leandro Zdero aseguró: “La docencia merecía recuperar la pérdida del poder adquisitivo de los años 2017 y 2018 debido a que la inflación superó en porcentajes a este incremento salarial docente. La docencia no quiere montos en negro porque no repercute en el salario de los jubilados que también están afectados por la inflación”.
La educación debe ser abonada de manera seria
“Es inaceptable, hoy el aumento no debe ser menor al 30%. La docencia es un sector castigado junto a la Salud, Policías y los empleados públicos, y ni hablar del impacto negativo que tiene en los pasivos que nunca se les acredita el 82% móvil automáticamente y tampoco les impacta los ítems en negro. El gobernador debe cumplir con su palabra y con el compromiso asumido ante toda la docencia chaqueña. Este 7,8 % de aumento que se aplica únicamente al básico, sería $880 por cargo, o sea un sueldo pasaría de $11.293 a $12.173 y esto no alcanza, no se ajusta a la realidad”, añadió Zdero.
Carina Batalla por su parte, agregó: “La educación que hoy tenemos no es gratuita, como debería serlo, los docentes tienen que pagar internet o pack de datos en sus celulares, de sus bolsillos, y hay muchos que ni siquiera pueden hacerlo. La educación debe ser tratada de manera seria, hay docentes que se quemaron las pestañas para recibirse y hoy ni siquiera pueden tener un cargo ni ejercer su profesión”.
Por último, Alejandro Aradas manifestó: “Dentro de las preocupaciones es saber quiénes van a cobrar esos $1200 porque si no están en la plataforma ELE registrados no lo van a cobrar seguramente; una plataforma en la que los mismos docentes aseguran tiene errores conceptuales y ortográficos y con temas que se alejan de los contenidos para los estudiantes. Están vaciando sistemáticamente la educación pública para convertirla en la caja POLÍTICA del año que viene. No les alcanza para pagarle lo que corresponde a los docentes que se rompieron el alma estudiando, los que hacen dedos en las rutas chaqueñas para llegar a sus escuelas, porque destinan mucho dinero a sostener esas escuelas de gestión social donde son directores los amigos del gobierno y que no tienen un mínimo de control por parte del Ministerio de Educación”.