Hasta su vencimiento, el próximo 30 de junio, lo que lo convierte en el «contrato más caro de la historia del deporte».
El diario El Mundo publica en exclusiva en la edición de este domingo los términos de dicho contrato cuyo importe aclara es «la suma de salario fijo, derechos de imagen, una serie de primas multimillonarias inéditas hasta la fecha, dietas y un rosario de variables dependiendo de diversos objetivos».
Según el rotativo «el cóm puto neto, una vez aplicados los impuestos (el tipo más alto del IRPF para los ingresos procedentes de su contrato laboral, y el del impuesto de sociedades para los ingresos procedentes de su contrato de imagen), además de las deducciones de la Seguridad Social, representa más de la mitad de esta cantidad: alrededor de 297 millones de euros».
La remuneración representa, según El Mundo, 138.809.404 euros brutos (74.900.000 netos), que desglosa de la siguiente forma: 380.299 euros brutos al día (210.297 euros netos), cifra a la que hay que añadir los rendimientos de la explotación de su imagen, apartado en el que el jugador se reserva, además, hasta el 80% de los ingresos obtenidos por este concepto.